"La vida es demasiado importante para tomársela en serio"
Oscar Wilde
Utilizo este prólogo para poner en contexto este post en el blog.
Entrando en el campo de una hipotética nueva línea de investigación, se me ocurrían las siguientes reflexiones:
Para empezar, ¿como se llevarían a cabo los primeros ensayos con modelos animales?
Mejor corramos un tupido velo.... y pasamos directamente a la fase III del ensayo clínico
1) Este sería el clásico ensayo clínico donde no tiene ninguna gracia estar en el "grupo de control".
Por cierto, en este caso ¿ que entenderíamos por "administrar un placebo"?
2) ¿Como reaccionaria la curia vaticana delante de unos resultados que demostraran el efecto neuroprotector?
3) ¿El tratamiento, lo tendría que cubrir, perdón financiar, la seguridad social?
4) ¿El tratamiento tiene efectos secundarios? ¿Causa adicción?
5) ¿Que hacer en caso de saltar una "toma"? ¿Dos seguidas?
6) En caso la pareja alegue "dolor de cabeza", ¿se trataría de un efecto secundario?
7) Para asegurar el mejor resultado, ¿hay que recurrir a profesionales de la materia?
8) Podrían darse resultados diferentes dependiendo de "la forma farmacéutica" o la "vía de administración"?
Vale, de acuerdo. Hasta aquí puedo leer.
El resto lo dejo a la fantasía del lector, que como nos ensañan los sexólogos es lo mas importante para que "el tratamiento" funcione.
1 comentario:
Pues nada tres tomas al día, y el que este peor ya sabe...
Dejarse llevar por la imaginación y hacer, sentir, lo que mas placer te de, disfrutar ¡¡¡Ey!!! es nustro neuroprotector. Y además muy pero que muy natural.
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